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fluye dentro mío
me recorre
aunque a veces duele
ahora lo siento
muy dulcemente...




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El bullicio incoherente atrofia nuestros sentidos
Está ahí en lo alto
No me mira, pero sabe que estoy acá, escondiéndome como él
No sé por qué nos refugiamos en distintos lugares




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Había coches y luces eléctricas, vías de tren y una barrera. Eran las ocho de la noche más o menos.
Yrigoyen y Loria en el principio de los tiempos, cuando no había civilización alguna y los hombres apenas balbuceaban.




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